Intento infructuoso de emborracharme. Colaboré, pero dado que lo más fuerte que teníamos era mistela, y a pesar de que casi me ventilé una botella yo solito (qué bien entra la mistela fría), lo único que hizo fue potenciar mis capacidades sociales y entablé conversación con un nuevo amigo, Timmy. Al principio parecía tener calor, y le di agua. Luego creo que tenía ganas de beber, así que le hice un charquito de Sandevid. Debió de gustarle, porque se movia bastante despué eso.
Claro, que al final se le sentaron encima y Timmy no volvió a moverse. Estará en el cielo de las orugas.
Ver a Luna bailando ska es como ver al niño retraído y tímido de clase bailando breakdance. He de reconocer que la primera vez, en un concierto de Extremoduro el verano pasado, cometí el error de intentar cubrirla. Después de ese concierto me encontré pensando si no sería mejor para la humanidad cubrir a los que la rodean. No me entendáis mal, no es agresiva, sólo que tiene una facilidad increíble para esquivar gente y de paso mandarla a un par de metros de distancia.
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Di "amigo" y entra