miércoles, 20 de noviembre de 2013

De nuevo, contigo

Esta vez ya no pasas de los hombres. Ya no quieres no saber nada de novios, ni abjuras del amor. Tampoco estás ya en la fase de querer que cualquiera te quiera. Menos mal, por muchos ratos divertidos que nos diera esa etapa, iba a acabar con tus nervios (y los míos, porque vaya pelmazos).

No, ya no. Ahora estamos en la penúltima etapa. El principe azul. O verde, o morado, porque el azul es para esas niñas que no saben lo que quieren y le pondrían "te quiero" al primer tipo que se cruzaran. Pero tú no eres de esas. Tú no buscas lo que las demás. Tú le buscas a Él y no te conformarás con nada menos.

La mayoria de los cabrones a estas alturas de la vida no tienen vuelta atrás. Se les congeló la sonrisa a mitad del juego. Decidieron quedarse para siempre la piel que ahora llevan, cambiendo apariencia por realidad y viceversa. Encontraron más fácil vivir así, el juego permanente. O se rompieron y ahora agachan la mirada o aprietan la mandíbula, amargados. Creo que tu "él" fue "Él" durante un momento y luego siguió avanzando.

Cuanto más pasan los años más acepto que no hay persona perfecta ni media naranja, ni limón, ni nada. Sólo hay personas con las que encajas y puedes trabajar. Como todo en la vida, si te esfuerzas lo consigues y si no, a volver atrás y recomenzar.

No one falls in love by choice, its by chance. 

No one stays in love by chance, its by work. 

No one falls out of love by chance, its by choice.

viernes, 1 de noviembre de 2013

1:26

Que yo que sé. Que no me doblo. No es más fuerte el que más golpes da, sino el que más golpes aguanta. Y otra cosa no, pero fuerte soy desde pequeñito. Me reía siempre, por enfermo que estuviera, aunque apenas pudiera mantenerme erguido sobre el sofá del que me colgaban los pies, que aún ni me llegaban al suelo. Me reía y era feliz.

Ahora ya nunca me rio así, como si fuera posible hacerlo cuando ya se ha rodado un poco. Pero sigo de pie pase lo que pase, bailándola igual contigo que sin ti, sin ser vencido. No me he vuelto malo, me he vuelto real. Aquí todo se somete a las leyes físicas.