Fue un finales de abril cuando nos conocimos, hace dos años. Tuve un crush muy fuerte, como no había tenido en demasiado tiempo. Ya lo sabes. Entré en modo adolescente y no pensaba en otra cosa.
Han pasado dos años y miles de páginas. No quiero extenderme mucho, tampoco puedo o el fuerte saltará por los aires, pero al menos te mereces tu página aquí. Por hacerme ver que sé y puedo ser feliz y sufrir por alguien. Por hacerme sentir vivo, por hacerme querer. Por entender y recordad que la realidad se impone siempre, sí, pero que al mismo tiempo hay espacio y tiempo para que valga la pena.
Cuídate, panda.